Por Jeremy Mendez
2021-04-02 17:20:02
Reserva Los Manantiales en Río Ceballos, uno de los ejes de conflicto
La localidad de Río Ceballos viene atravesando distintos conflictos en material político-ambiental. La situación ha llevado a las recientes renuncias de la directora de ambiente, Silvana Herrero, y del Secretario de Obras y Desarrollo Urbano, Gabriel Campos.
El conflicto entre ambientalistas y la Municipalidad de Río Ceballos comenzó ni bien asumió el intendente Eduardo Baldassi (PJ) en 2019. La nueva gestión decidió derogar la Secretaria de Ambiente – que era considerada un logro de los movimientos ambientalistas de la localidad – y convertirla en una Dirección, dependiente de la Secretaría de Políticas Públicas.
Con respecto a esto, Cristian Schneider de la Asocioación para la Conservación y el Estudio de la Naturaleza (ACEN) explicó a este medio: “Eso es una decisión que toma el mismo intendente en su organigrama y que luego se va también trasladando a lo que era el trabajo cotidiano, el mes a mes”. Y agregó que desde ACEN “lo que veíamos es que todas las actuaciones que se planteaban desde el consejo de gestión o en otras actuaciones de la Dirección de Ambiente, es que se empezó a evidenciar una cantidad de trabas para poder avanzar en lo que era decisiones que se demandaban formalmente”.
Tras una constante falta de diálogo, faltas de respuestas a comunicados y pedidos formales, entre otros conflictos, aparece un nuevo detonante a finales del 2020. En el mes de diciembre se presentó el presupuesto municipal, donde los movimientos ambientalistas notaron una reducción en el dinero que se direccionaba a ambiente. Schneider lo detalló a este medio: “puntualmente en diciembre 2020, la tasa ambiental para sostener la reserva, se reduce prácticamente en un 40%” y agrega: “No sólo que no se actualiza con el índice inflacionario que estamos teniendo de entre un 30 y un 40%, sino que se disminuye un 40%, es decir que entre un 70 y un 80% disminuyen el financiamiento de la reserva”.
Con respecto a este desfinanciamiento, Schneider reflexionó: “queda claro que una política ambiental con cero presupuesto o desfinanciada es una política que no se quiere implementar” y agregó: “Desfinanciarla es que esa política no llegue al territorio”.
Finalmente, el último conflicto empezó el 25 de marzo cuando se les comunica a las trabajadoras y trabajadores de la Dirección de Ambiente que se iba a trasladar la dirección de la Secretaria de Políticas Públicas a la Secretaría de Obras y Desarrollo Urbano. Si bien no hubo una presentación formal al Consejo Deliberante para el cambio en el organigrama municipal, entienden que, de facto, la decisión está tomada.
Lo que explican las trabajadoras y trabajadores en una carta abierta es que el día 29 de marzo “nos presentaron a trabajar a primera hora aún sin noticias formales. Aproximadamente a las 8 de la mañana se hicieron presentes el Asesor Letrado Dr. Carlos Sosa y la Directora de Planeamiento Arq. Paula Emiliozi, quienes nos comunicaron escuetamente que el Área pasaría a la Secretaria de Obras y Desarrollo Urbano a cargo de un Coordinador a partir del lunes siguiente”.
El comunicado completo:
En cuanto a este cambio en el organigrama, Cristian Schneider explicó a este medio que él lo considera “una incongruencia absoluta en cuanto a objetivos de gestión, manejo y control que tienen diferentes secretarías” y amplió “la parte ambiental tiene que normar o controlar determinadas actuaciones que haga la Secretaría de Obras para cotejar o para verificar si están en regla o no con la normativa ambiental”.
Continuando con esto, Schneider consideró: “hay objetivos diferentes y mecanismos de control diferentes por lo que hay incompatibilidad de lo que significa pasar Ambiente a Obras”. Además, reflexionó: “evidencia claramente una política de desarticular esa dirección, desarticular en todo caso la política ambiental y subordinarla a lo que fueran las decisiones más que todo urbanísticas”.
El día 26 de marzo, la directora de Ambiente, Silvana Herrero, presenta su renuncia al cargo sin explicar mucho. Desde el ejecutivo municipal, explicaron que le pidieron su renuncia. Sin embargo, Herrero declaró a un medio local que un detonante fue su desacuerdo en relación a las asignaciones presupuestarias hacia el área: “denotan la falta de apoyo institucional para el desarrollo de planes y programas que faciliten la implementación de políticas ambientales municipales”, explicó Herrero a la Revista La Unión Regional. Y, en segunda instancia, un ambiente hostil de trabajo, con violencia constante política, institucional y de género.
La entrevista completa:
Por su lado, Cristian Schneider se mostró comprensivo con la renuncia de Herrero, quien estaba en medio de las acusaciones por la poca política ambiental de la localidad: “bajan una tasa ambiental, deslegitiman a la dirección de ambiente, traban absolutamente determinados pedidos que hacemos en cuanto a pedido de mejoramientos de gestión o de equipamiento de la dirección y de la reserva, y puntualmente no hay respuesta ante pedidos muy importantes de posicionamiento con respecto a problemáticas concretas de riesgo de desmonte, queda claro que son elementos por los que Silvana Herrero habrá dado ese paso al costado”.
El pasado 31 de marzo, el secretario de Obras y Desarrollo Urbano, Gabriel Campos, renunció a su cargo alegando “cuestiones de cansancio” y “desacuerdos en medidas que emanan desde el ejecutivo”, según declaró a Revista La Unión Regional. Además, declaró que su renuncia no tiene nada que ver con el conflicto con la Reserva Los Manantiales ni con la renuncia de Silvana Herrero.
La figura de Gabriel Campos era muy resistida por los movimientos ambientalistas locales por distintas expresiones y declaraciones que había realizado. Cristian Schneider explicó a este medio que Campos se había mostrado en contra de la existencia de la reserva y que: “Queda claro que él veía que era un escollo la reserva para la aprobación o para el modelo urbano o urbanístico que tuviera en su mente o en sus intenciones”.
Sin embargo, la renuncia de Campos no frena el reclamo en contra del cambio de Secretaría en la Dirección de Ambiente. “En realidad el descontento era que este cambio de órbita de la dirección de ambiente iba a ir a una secretaría que no corresponde, que tiene conflictos en cuanto a objetivos y en cuanto a régimen de control”, explicó Schneider a Gen. Luego explicó: “No era puntualmente con él, sino que él evidenciaba una posición de lo que estábamos viendo que en la gestión en este momento de Río Ceballos”.
Sobre la renuncia de Campos, el ambientalista y fotógrafo Guillermo Galliano dijo a este medio: “No creo que cambie mucho porque el que tiene que renunciar es Baldassi para que esto cambie” y explicó: “El intendente está presionando para que esto trascienda y poder avanzar sobre la reserva”.
Mientras se espera que el ejecutivo presente el proyecto del nuevo organigrama en el Consejo Deliberante, lo conflictos ambientales en la localidad siguen sucediendo y, eventualmente, no hay dirección en funcionamiento que pueda gestionar los conflictos.
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